El trifosfato sódico (TSP) es un agente limpiador potente que se ha utilizado durante décadas en aplicaciones de limpieza industrial y doméstica. Su capacidad para eliminar manchas difíciles y grasa lo convierte en la elección preferida entre los profesionales de la limpieza. El TSP actúa como un surfactante, ayudando a levantar la suciedad y el mugre de las superficies, mientras que sus propiedades alcalinas trabajan para neutralizar ácidos y descomponer materiales orgánicos. Esta versatilidad hace que el trifosfato sódico sea un ingrediente esencial en muchas soluciones de limpieza, proporcionando a los usuarios una experiencia de limpieza confiable y eficiente.