El sulfato de cobre, también conocido como sulfato cuproso, es un compuesto inorgánico de gran importancia en múltiples sectores. En la agricultura, se utiliza ampliamente como fungicida para proteger los cultivos de enfermedades y mejorar el crecimiento. En el sector minero, desempeña un papel crucial en la extracción de metales, especialmente del cobre. Además, el sulfato de cobre se utiliza en procesos de tratamiento de agua para controlar el algas y mejorar la calidad del agua. Su versatilidad y eficacia lo convierten en un químico esencial para las industrias en todo el mundo.